¿Dónde estaría entonces el alma? Una cuestión importante que quedaba por explicar era cómo algo «espiritual” podía poner en marcha un proceso mecánico.–En realidad es algo bastante curioso.
–¿Qué quieres decir? –Decidió
levantar un brazo, y entonces levanto el brazo. O decido ir corriendo a coger el autobús, e
instantáneamente mis piernas comienzan a correr. Otras veces puedo pensar en
algo triste. De repente, mis lágrimas empiezan a brotar. Entonces tiene que
haber una misteriosa relación entre el cuerpo y la conciencia.– Precisamente
este problema puso en marcha los pensamientos de Descartes. Igual que Platón,
estaba convencido de que había una clarísima separación entre “espíritu” y “materia”.
Pero Platón no pudo responder a la pregunta de cómo el cuerpo afecta al alma, o
cómo el alma afecta al cuerpo. – Yo tampoco puedo, así que me gustada saber a
qué conclusión llegó Descartes.– Sigamos su propio razonamiento .Alberto señaló
el libro que estaba sobre la mesa que había entre ellos.– En este pequeño libro, Discurso del
Método, Descartes plantea en la
cuestión de qué método debe emplear el filósofo cuando se dispone a solucionar
un problema filosófico, pues las ciencias naturales ya tenían su nuevo método.–
eso ya lo has dicho.–Descartes constata primero que no podemos considerar nada como
verdad si no reconocemos claramente que lo es. Para conseguir esto puede que
sea necesario dividir un problema complejo en cuantas partes parciales sea
posible. construir nuevos conocimientos. Al final había que hacer constantes
recuentos y controles para poder Aregurarse de que no se había omitido nada.
Leyendo esta fracción del texto y sacando conclusiones junto a mi compañero(a) hemos decidido que la relación de descartes con el mundo de sofia es que sofia al escuchar la clase y pararse para ir a la salida del colegio sintió una emoción de tristeza y comenzó a derramar lagrimas hay se pregunta el ser humano donde guarda su alma y de donde vienen las emociones, eso lo resuelve conociendo lo que descartes plantea sobre que "el estaba convencido de que había una clarísima separación entre “espíritu” y “materia”.